Proyecto situado en Sant Miquel de Campmajor, contratado por el propio Ayuntamiento, y consistente en un sistema fotovoltaico sobre estructura metálica calzada sobre el depósito de aguas, formado por 14 paneles monocristalinos de 455 Wp, los cuales representan una potencia de 6 Kwp.
Esta instalación generará un ahorro ecológico anual de 3 toneladas de CO2; y un ahorro acumulado a los 25 años de más de 30.000 Euros. Por otra parte, las placas fotovoltaicas instaladas en el área de los depósitos y bombas de agua por la Red Municipal, permitirán que el bombeo funcione de forma sostenible a través de la energía solar.