Proyecto situado en Sant Miquel de Campmajor, contratado por el propio Ayuntamiento, y consistente en un sistema fotovoltaico sobre estructura metálica calzada sobre el depósito de aguas, formado por 14 paneles monocristalinos de 455 Wp, los cuales representan una potencia de 6,37 Kwp.
Esta instalación generará un ahorro ecológico anual de 52 toneladas de CO2; y un ahorro acumulado a los 25 años de más de 30.000 Euros. Por otra parte, las placas fotovoltaicas instaladas en el área de los depósitos y bombas de agua por la Red Municipal, permitirán que el bombeo funcione de forma sostenible a través de la energía solar.